Almanaque Gnóstico
El Equinoccio de Otoño
El Equinoccio de Otoño es el segundo punto anual de perfecto equilibrio entre el día y la noche, ocurre el 21 de septiembre. En este periodo, el ir y el venir se registran como un único movimiento; las dualidades se dispersan para dejar paso al equilibrio. El equilibrio de los opuestos significa, simbólicamente, la consumación de la relación entre el dios y la diosa; es la cámara nupcial. A partir de este momento, la consciencia comienza a descender en el submundo, en las tinieblas y en la inconsciencia. Es preciso tener consciencia de este periodo de preparación trazando un mapa espiritual, de modo que podamos encontrar la verdadera plenitud del alma.
Lecturas
Eclesiastés 3: 1, 1-15
Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.
He entendido que todo lo que Dios hace será perpetuo; sobre aquello no se añadirá, ni de ello se disminuirá; y lo hace Dios, para que delante de él teman los hombres.
Aquello que fue, ya es; y lo que ha de ser, fue ya; y Dios restaura lo que pasó.
Evangelio de Tomás (22)
Jesús les dijo: «Cuando seáis capaces de hacer de dos cosas una, y de configurar lo interior con lo exterior, y lo exterior con lo interior, y lo de arriba con lo de abajo, y de reducir a la unidad lo masculino y lo femenino, de manera que el macho deje de ser macho y la hembra hembra; cuando hagáis ojos de un solo ojo y una mano en lugar de una mano y un pie en lugar de un pie y una imagen en lugar de una imagen, entonces podréis entrar [en el Reino]».
Comentario
El Equinoccio de Otoño
La Doctrina Gnóstica: Dios y Diosa
Hoy es fundamental retomar la discusión sobre la doctrina gnóstica, especialmente al mencionar al Dios y la Diosa, lo cual puede resultar sorprendente para algunos. En el principio, en la soledad de Dios, cuando decidió crear el universo, comenzó emanando los Eones que componen la Deidad. Estos Eones son manifestaciones de sus poderes presentes en su plenitud, conocido como el Divino Pleroma. Las emanaciones se realizaron en parejas, llamadas Sicigias, que incluyen un principio masculino o activo y uno femenino o pasivo. Por eso hablamos del Dios y la Diosa; para los gnósticos, todo está compuesto por estos dos principios.
Celebrando el Equinoccio de Otoño
Hoy celebramos el Equinoccio de Otoño, el segundo punto anual de perfecto equilibrio entre el día y la noche, que ocurre el 21 de septiembre. Durante este período, el ir y el venir se fusionan en un solo movimiento, las dualidades se disuelven y surge el equilibrio. Este equilibrio simbólico de los opuestos representa la consumación de la relación entre el Dios y la Diosa, como una cámara nupcial. A partir de este momento, la conciencia comienza a descender al submundo, hacia las tinieblas y la inconsciencia.
El Ciclo Solar y su Simbolismo
La Tierra traza un círculo alrededor del Sol cada año, formando una cruz en el cielo en los puntos que marcan las estaciones: los dos solsticios y los dos equinoccios. Estos cuatro puntos son cruciales, y cerca de ellos situamos las fiestas de los cuatro arcángeles, que actúan como guardianes de estas puertas místicas. Durante los equinoccios, la Tierra está equidistante del Sol, equilibrando las horas de luz y oscuridad. En el equinoccio de otoño, la luz comienza a disminuir en favor de la oscuridad, tendencia que continuará hasta el solsticio de invierno, cuando la luz renacerá.
El Equilibrio en la Vida Humana
Las religiones han utilizado el ciclo solar para simbolizar las batallas internas del ser humano año tras año, y esta vez no será diferente. El Equinoccio representa principalmente el EQUILIBRIO, donde la dualidad universal se nivela momentáneamente. Permítanme resaltar la importancia de esta virtud: el equilibrio es esencial en la vida, ya que sin él, nos desequilibramos. Nuestra existencia es como caminar constantemente por una cuerda floja, y nuestro desafío es encontrar y mantener este equilibrio. Afortunadamente, en esta tarea no estamos solos; Dios siempre nos brinda su ayuda.
Reflexión sobre el Viaje hacia la Oscuridad
Nuestro viaje se dirige hacia la oscuridad durante esta época. Por ello, es más crucial que nunca mantener nuestra atención en no olvidar que provenimos de regiones de mayor luz y que eventualmente retornaremos a ellas. En momentos de duda, es necesario recordar quiénes somos, de dónde venimos y hacia dónde vamos.
Plegaria
ORACIÓN A LOS PADRES CELESTIALES.
Señor Todopoderoso, Padre Nuestro; Omnisapiente Señora, Madre Nuestra;
Padres celestiales de todo lo que fue, es y será; sustentadnos, a nosotros vuestros hijos, en este día.
Dadnos la sabiduría para ver vuestro sendero, y la fortaleza para prevalecer en la hora más oscura.
Os agradecemos por los gozos que tenemos y por vuestra gracia otorgada a nosotros, en este día y cada día.
Que podamos prosperar y crecer en conocimiento, en sabiduría y comprensión.
Ahora y siempre.
Amén.
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